sábado, 24 de julio de 2010

Perfect day.

Bikinis: Primark.

Viernes veintitrés de Julio, nos levantamos, desayunamos y hacemos nuestras cosas.
Nos duchamos, nos peinamos, nos ponemos el bikini y nos echamos el make-up de piscina: Eye liner de purpurina, gloss claro y purpurina en el escote; nos vestimos y nos vamos a la piscina.
Nada más llegar buscamos un sitio que tenga sol y sombra, para tomar el sol y ponernos aun más morenas. Dejamos en el césped las mochilas, nos quitamos las sandalias y colocamos nuestras toallas. De repente, Becky y yo nos miramos. Nos reímos juntas, yo me hecho a reír por una tía haciendo top less, y yo pensaba que nos reíamos por lo mismo, pero no, ella se reía por tres tíos que nos habían quedado mirando.
No nos gusta nada que nos miren tanto, y tan descaradamente, así que dejamos la ropa al lado de nuestras mochilas en un montoncito y nos fuimos a bañarnos casi corriendo para alejarnos de allí lo antes posible.
Nos vamos bordeando la piscina a la ducha y nos metemos debajo de ella saltando. Para vuestra información el agua no estaba fría, estaba helada. Mientras caminábamos bajando las escaleras nos sentimos observadas, miramos a la izquierda y los tres mirándonos, así que nos metimos corriendo en la piscina y empezamos a nadar para que no nos viesen, pero nada, seguían con los ojos pegados en nosotras, y con todo el descaro del mundo, sin disimular, con un canteo tremendo.
Pasamos un poco de ellos mientras nos reímos a carcajadas de paridas tontas. Hacemos un par de anchos, yo nadando y Becky buceando. Llegamos agotadas al otro lado de la piscina y descansamos mientras cogemos aire. Estamos en plena forma, además, nadar y hacer ejercicio nos encanta.
De repente les vimos y venían hacia la piscina, nosotras empezamos a nadar y a hacer el tonto, pero uno de ellos, el calvito, no nos quitaba ojo, o al menos nosotras pensábamos eso. Siempre estaba a nuestro lado, cerca nuestra, y nosotras huíamos, por impulso propio. Y luego el otro, el monillo pero feo, se quedaba más rato en la piscina que los otros, siempre que estábamos nosotras dos, él estaba allí, en la piscina, nadando, mirándonos con algo de disimulo. Nos salíamos del agua y salía él, detrás de nosotras, como nuestro guardaespaldas.
Nos tumbamos en la toalla evitando que nos vean, pero nada, nada más salir no encuentran y nos observan, como si fueras niñas y ellos nuestras niñeras. Era agobiante.
La tarde continuó así, nos observaban, nosotras jugamos a las cartas, comimos, escuchamos música y nos bañamos.
Se tiraban todos a la vez, y nosotras igual. Era como una competición absurda, pero divertida. Nosotras les mirábamos tirarse y cuando ellos ya habían salido nos tirábamos nosotras y ellos nos miraban. Era divertido, gracioso. No lo hacíamos para lucirnos, ni mucho menos, lo hacíamos por reírnos, por pasar un buen rato.
Había uno, el de rojo, que estaba bueno, muy bueno, el único que estaba bueno, y era guapo, muy guapo. Y al principio del día, nada, alguna que otra mirada, pero no tantas como las de sus amigos. Pero cuando el día iba acabando teníamos más atención. Extraño.
Luego, una hora antes de irnos llegaron dos chicas, que se cambiaban el sitio según donde se colocaban ellos, para ser atendidas, y lo fueron, pero yo, Marie, me compré un helado, y una avispa se acerco a mi helado, y por instinto me aleje, asustada, y tiré el helado, y se empezaron a reír, por eso y por cosas que no sabíamos.
Estábamos cansadas, muchas miradas, acoso, y luego miran a las tías esas. Y encima se ríen de nosotras. Les mandamos a la mierda, estuvimos a lo nuestro.
Y aquí llega la parte divertida. Nos levantamos, recogemos nuestras toallas y nos ponemos la ropa, y casualmente, ellos hacen lo mismo, cuando no parecía que se fueran a ir. Casualidades.
Nos ponemos nuestros iPod’s y nos vamos, con nuestras faldas, nuestras sandalias, y nuestras mochilas. Nos peinamos en los espejos, nos echamos brillo de labios y salimos fuera. Vemos un periódico y leemos un reportaje sobre Casillas y Sara Carbonero, y otra vez ellos. Detrás nuestra, cogiendo un periódico cada uno.
Cerramos el periódico y lo dejamos donde estaba. Salimos a la calle y vamos por otro camino diferente al de siempre, y al girarnos les vemos a los tres mirándonos desde la esquina. Nos reímos tan solo con mirarnos.
Nos dicen cosas a lo lejos, cosas que nos aseguraban nuestras ideas. Nos miraban a nosotras, es decir, que las miradas maliciosas de las tías que querían ser observadas no nos sirvieron nada más que para reírnos, hacernos pasar un día perfecto. Porque, yo, he llegado a una conclusión, pase lo que pase, vayamos donde vayamos, cuando las dos, Becky y yo estamos juntas siempre es un día perfecto.
Después de reírnos un rato con lo que nos decían, nos dimos una vuelta por el barrio para hacer algo de ejercicio. Y después cada una para su casa.
Por cierto, hemos acabado más que morenos. Ojala estuviésemos siempre así, morenas, durante todo el año.

sábado, 10 de julio de 2010

Just us.


Marie.
Nací en Mayo, en la Tierra, lugar donde, a día de hoy, sigo viviendo, con un pequeño cambio, naci en el hospital a manos de un tío que me azotó el culo y ahora vivo en casa de mis padres.
Soy bipolar, tengo dos gemelos, el bueno y el malo. Uno para cada estado de ánimo.
Me encantan las rebajas, las compras y lo relacionado con las tiendas, pero no soy la típica niña pija materialista, no, vivo con los pies en el suelo, menos cuando estoy en Geografía y me subo a las nubes.
Mi tienda favorita es Stradivarius, amo esa tienda, es muy de mi estilo, aunque también compro en Pimkie, Pull and Bear y tal, donde pille algo que me gusta, es donde compro. Eso sí, no me compro una falda de cincuenta euros, como máximo veinte, y solo si me encanta y es para una ocasión especial.
Sí, me gusta la ropa, pero lo que realmente me apasionan son los zapatos. Sobre todo los de tacón, pero yo con los zapatos tengo problemas, muchos problemas, ya sabéis, un numero de pie difícil.
Mis zapatillas favoritas son mis All Stars negras de botas, no las cambiaría por nada, son muy cómodas y me pegan con todo. Amo las converse.
Otra de mis pasiones es el maquillaje, amo el pote, pero no soy de las que se pinta como una puerta. Mi marca favorita es Bourjois, es cursi y por eso me gusta.
Tengo bastante maquillaje para mis quince años de edad, pero solo me maquillo para ocasiones especiales, y entre diario la raya por encima de las pestañas muy difuminada para que no se vea y un poco de rímel a veces, y lo que siempre siempre siempre llevo es un gloss o cacao, no puedo ir con los labios sin nada, y otra de mis manías es llevar siempre las uñas pintadas, mi esmalte favorito es uno rosa salmón de Claire’s, mi sombra favorita una de color bronce de Bourjois, mi pintalabios favorito uno rosa-rojo de Kiko Cosmetics, mi rímel favorito el Black de Bourjois, y mi gloss favorito uno de Bourjois que no sé como se llama.
No me dejo llevar por los demás, alguna vez sí, pero creo que es importante que una este a gusto consigo misma, y si eso es así, ¿para qué queremos más?
Sí, como toda adolescente me he enamorado, y lo sigo haciendo, pero no voy a decir nombres que luego todo se sabe. Lo he pasado mal por amor, pero como que ahora paso.
Mi grupo favorito son los Jonas Brothers, y mi cantante favorita es Miley Cyrus, no podría elegir entre ninguno de los dos, son muy especiales para mi, y mi fecha favorita es el Once de Noviembre, el concierto de los Jonas en El Palacio de los Deportes de Madrid, concierto en el que me emocioné nada más empezar y en el que lloré cuando el escenario se quedó en silencio, en el centro apareció Nick con su piano blanco y un foto que lo iluminaba, y todos empezamos a cantar mi canción favorita, su canción, A Little Bit Longer. Todos cantando esa canción, esa canción con tanto significado para mí, para él, para todos. Fue el mejor momento de todo el concierto, y bueno, el final cuando salieron con la camiseta de la selección española también. Son mis ídolos, y pase lo que pase les defenderé cuando los insulten.
Pasemos a otro punto … Las notas, los estudios y tal. No soy una empollona, intento aprobar todas aunque sea con un cinco pero soy capaz de sacar sietes y ochos, si quiero, pero hay veces en las que estudiar no me gusta y menos cuando es Sociales o Física y Química. Soy una chica de letras, y por lo tanto pienso estudiar una carrera de letras, la cosa está entre periodismo o fotografía, por una de mis aficciones es la fotografía, me encanta hacer foto, editarlas, y esas cosas.
Y la cosa que mas necesito en mi día a día es mi iPod, cuando me castigan sin él me pongo mal, necesito la música, en todos los momentos de mi vida está la música. Me encanta todo tipo de música, pero mi estilo favorito es el Pop, acorde a mi forma de ser.
Ah y una de mis manías es crujirme los dedos, me encanta.
En definitiva, soy una chica sencilla. No destaco entre las demás ni nada por el estilo.
Creo que según se me venga a la cabeza ideas de cómo soy y tal con mi Becky pues las iremos escribiendo.
Love you, Marie.


Becky.
Nací en Septiembre, en el Universo.
Soy una chica bastante cursi, y de hecho lo admito y me gusta recocerlo.
Mi color favorito es el rosa, muy a lo Barbie. Aunque no siempre voy a lo niña de papa, otras veces suelo ir, no sé, a lo skater, a lo hippie, según el día. No tengo el estilo definido, si veo algo que me guste de ropa me lo compro (siempre que tenga dinero, cosa que a veces no está a mi favor). Las compras es algo que me encanta, ir de tienda en tienda, pero no me compro cosas por capricho, alguna vez que otra sí, pero no siempre, ah, y una cosa importante, las compras no es lo único en nuestra vida.
Supongo que como Marie, mis grupos favoritos, mi cantante favorita, mi marca de maquillaje favorita y tal es igual, pero son muchas cosas en las que no coincidimos. Cada una pretende hacer una carrera diferente, aunque las dos vamos a ir por letras. Yo quiero estudiar psicología, me apasiona.
Mi iPod es mi vida, es algo importante en mí, a todas partes voy con él. La música es parte de mí.
Mis All Stars de bota rosas siempre las llevo, con mis shorts. Me encantan.
Y los vestidos, soy una loca por los vestidos. Siempre insisto en hacerme fotos con ellos junto con Marie, pero ella nunca quiere. Es como una obsesión que no puede controlar, al igual que la obsesión por los zapatos de tacón. Los únicos tacones que tengo con unos rosas de Bershka. Solo tengo esos porque no tengo dinero, pero si no tendría muchos más, tantos que n siquiera me cabrían en mi armario. Al igual que mi Vans, me encantan mis Vans. Son caras pero me encantan.
Mi canción favorita es la de Goodbye de Miley, esa canción tiene algo que no me ralla, aun después de que la he escuchado miles de veces, como la de Sorry de los Jonas, mi otra canción favorita.
Los libros … me encanta leer. No tengo libro favorito, simplemente no puedo elegir. Aunque seguro que cuando me lea La última canción me va a encantar, y será otro de mis favoritos, junto con las sagas de Crepúsculo y Cazadores de sombras, el de Tres metros sobre el cielo, el de True Blood, y un montón de libros de adolescentes que me he leído.
Los estudios. Saco buenas notas, no soy la niña diez de primero pero apruebo todas con seises, notables, y tal.
Soy tímida, muy tímida. Y no soy capaz de mostrarle a una persona que no conozco como soy de verdad fácilmente, solo mis amigas de verdad me conocen, y me gustan las amigas que me aceptan con mis defectos y mis virtudes, porque asi soy yo, y si te gusta bien, y sino … ajo y agua.
Love, Becky.